viernes, 4 de abril de 2014

La batalla que la UE perdió contra el escalón



En el artículo 9 de la Convención de las Naciones Unidas (ONU) sobre los derechos de las personas con discapacidad, aprobada el 13 de diciembre de 2006, se requiere que los Estados identifiquen y eliminen los obstáculos y las barreras. Y además, que aseguren que las personas con discapacidad puedan tener acceso a su entorno, al transporte, las instalaciones y los servicios públicos, y tecnologías de la información y las comunicaciones.

Sin embargo, aún no entendemos bien el alcance de este precepto. Es evidente que se han hecho importantes mejoras en los últimos años, pero ¿hemos logrado cumplir plenamente con ese objetivo? Mi respuesta es rotunda: no.

Hay que empezar distinguiendo entre lo que yo denomino accesibilidad activa y accesibilidad pasiva.

Los principales logros han venido de la mano de la accesibilidad pasiva. Las personas con discapacidad tenemos menos dificultades a la hora de salir a la calle, de utilizar el transporte público, de asistir como oyentes o espectadores a actos deportivos o culturales, y podemos estudiar en la mayor parte de los institutos y de las universidades públicas o privadas.

Pero ¿qué ocurre cuando no sólo queremos aprender o disfrutar, sino que también queremos trabajar, enseñar o exponer nuestro punto de vista en una conferencia? Ahí es donde vienen los problemas. ¿Habéis visto a muchos actores con movilidad reducida? ¿No será porque es prácticamente imposible subir a un escenario? ¿Habéis asistido a muchas conferencias impartidas por un conferenciante sordo o que se mueva en una silla de ruedas? ¿No será también porque los estrados no son accesibles y porque en ninguna parte se dispone de intérpretes de lengua de signos, a no ser que los lleve el propio conferenciante o que éste se encargue de llevar su propia rampa?

En Unión Progreso y Democracia (UPyD), trabajamos por la igualdad real y efectiva de todos los ciudadanos, sin que pueda existir ningún tipo de discriminación por razón de sexo, edad, religión, orientación sexual o discapacidad. Por ello, en materia de discapacidad, llevamos en nuestro programa para las elecciones al Parlamento Europeo la aprobación del Acta de Accesibilidad Europea, para que cosas como ésta no vuelvan a suceder:


miércoles, 2 de abril de 2014

Entrevista concedida a Servimedia 2/4/2014

ELECCIONES EUROPEAS

UPyD presenta un candidato tetrapléjico para impulsar la legislación de accesibilidad en la UE 

 

La candidatura de Unión, Progreso y Democracia (UPyD) para las elecciones europeas del 25 de mayo incluye al abogado Nacho Fernández en el octavo puesto. Fernández es tetrapléjico, está cursando un doctorado en Derecho y pretende impulsar la legislación de la UE en materia de accesibilidad.

En una entrevista a Servimedia, Fernández explicó que su partido pretende impulsar en el Parlamento Europeo un amplio paquete de reformas en materia de discapacidad, como la aprobación de un Acta Europea de Accesibilidad que garantice que todas las personas puedan acceder sin dificultades a edificios públicos y, sobre todo, a su centro de trabajo.
Alegó que las personas con movilidad reducida a veces ni siquiera pueden optar a un empleo porque la oficina a la que tienen que acudir para una entrevista no es accesible para personas en sillas de rueda, como es su caso.
A su juicio, otro de los principales problemas de accesibilidad que existen en la Unión Europea es el transporte en avión, ya que en el traslado suelen producirse daños en las sillas de ruedas a causa de los golpes que reciben, generándose averías frecuentes que conllevan un elevado coste para el usuario.
Fernández enumeró que, entre otras medidas, el programa electoral de UPyD para las elecciones europeas incluye perseguir la discriminación, sancionar a los países que la toleren, potenciar la educación inclusiva y reconocer la figura del asistente personal para la plena autonomía.
Además, resaltó que su partido aspira a una "profunda reforma del sistema institucional" de la UE para que el Parlamento Europeo tenga "plenas facultades legislativas", eliminar el Consejo Europeo como órgano de decisión y reducir toda clase de gastos superfluos.
También abogó, en este sentido, por "suprimir" la sede del Parlamento Europeo en Estrasburgo y las oficinas en Luxemburgo, para que todo el trabajo se realice en Bruselas y no haga falta mantener edificios que sólo se utilizan una vez al mes.
Desde UPyD consideran que son necesarias unas instituciones europeas "centradas en los ciudadanos" y advirtió de que los españoles "nos jugamos mucho" en la cita con las urnas del 25 de mayo porque hay formaciones antieuropeistas que quieren "destruir la Unión desde dentro y cobrando a final de mes" de las instituciones comunitarias.
Fernández, que está elaborando el programa electoral de su formación en lectura fácil para que puedan entenderlo personas con discapacidad intelectual, está ralizando una tesis doctoral en Derecho sobre la libre circulación de personas con discapacidad.
En la entrevista con Servimedia, aseguró que si sale elegido eurodiputado en las elecciones se marchará a vivir a Bruselas. Para ello, está aprendiendo alemán y flamenco, dos idiomas que se suman a los tres que ya habla con fluidez: español, inglés y francés.
Si no consigue el escaño, seguirá trabajando en UPyD por la plena igualdad entre personas y terminará la tesis doctoral, sin descartar concurrir a otros procesos electorales cuando lleguen las citas con las urnas municipales, autonómicas y generales de 2015.
Fernández se mostró convencido de poder aportar "ilusión de trabajar y hacer las cosas bien" gracias a la formación específica que obtuvo en legislación europea a través de un Máster en Unión Europea y el Doctorado que está cursando en estos momentos.